jueves, 4 de junio de 2015

Medio rey, de Joe Abercrombie

Abercrombie, de mis favoritos entre los autores más recientes en el género de fantasía, se ha apartado, al menos temporalmente, del Círculo del Mundo para urdir una nueva ambientación en la que situar su actual trilogía de novelas, El Mar Quebrado. Por el momento, en nuestro país ha sido publicada la primera entrega, Medio rey, a la que a finales de año le seguirá la segunda parte, y la tercera para principios de 2016.

Yorvi, hijo menor del rey de Gettlandia, ha pasado una infancia muy dura. La deformidad de una de sus manos le ha marcado desde su nacimiento, provocando la burla y el desprecio de quienes le rodean, incluyendo su propia familia. La vida que parece esperar a Yorvi, a medida que se adentra en la adolescencia, parece ser la tranquila existencia de un clérigo, erudito y consejero al servicio de su hermano mayor, una vez éste sea coronado. Pero la imprevista muerte de su padre y su hermano precipitan al joven al trono, y de ahí a una vida realmente azarosa y llena de peligros, de los cuales sólo podrá librarse gracias a los más improbables aliados, así como a su astucia.

El Mar Quebrado al que se alude con el título de la trilogía es un mar interior, rodeado por una serie de reinos y territorios que recuerdan a algunas de las sociedades presentes en Europa durante la Alta Edad Media. La propia Gettlandia parece ser una versión de un reino escandinavo, que comienza a dar los primeros pasos en dirección a una economía más compleja que la que han mantenido hasta el momento (una sensación de cambio en el mundo que también tiene lugar en los libros del Círculo del Mundo). Un Alto Rey, figura habitualmente considerada un primero entre iguales, está tratando de convertirse en un verdadero gobernante de todos, usando como una de sus principales herramientas la difusión de una religión monoteísta que sustituya al politeísmo imperante. Y todo eso con "ruinas élficas" salpicando el mundo, ruinas que, a juzgar por sus descripciones, en ocasiones resultan sospechosamente parecidas a edificios modernos.

Esta novela está dirigida al público juvenil. Pero que eso no lleve a engaño. Es cierto que aquí el autor se contiene mucho a la hora de detallar escabrosidades o de ser muy explícito en determinadas situaciones, algo a lo que los lectores de La Primera Ley y sus continuaciones ya estarán acostumbrados.

Al principio, Medio rey recuerda, y mucho, a la serie de Miles Vorkosigan; Un joven que a base de ingenio y voluntad supera sus discapacidades demostrando su valía a los demás y a sí mismo. Pero esa impresión se reduce paulatinamente, a medida que se puede apreciar que, juvenil o no, sigue siendo una novela de Joe Abercrombie. Yorvi es astuto y tienen labia, pero también siente dudas, y a menudo sus planes consisten en escoger el mal menor, cuando un desenlace feliz resulta imposible. Poco que ver con los resultados perfectos que siempre obtiene el personaje de Bujold, que siempre se las apaña para salir airoso y resolver la situación con el menor daño posible, y nunca para los inocentes. Los planes y las acciones de Yorvi, por el contrario, a menudo acaban saldándose con el sufrimiento de otros, aunque esa no fuese su intención. O a veces, porque considera que no le quedaba otra salida si quiere seguir adelante.

Como acostumbra en el autor, el punto fuerte de la novela es la caracterización del protagonista, muy lograda y llena de detalles, esquivando el encasillado fácil en algún arquetipo (como decía, aunque al principio recuerda al héroe astuto estilo Vorkosigan, en realidad es más complejo que eso). Los secundarios, que están ahí para complementar y/o contraponerse a los rasgos del protagonista, están menos perfilados, basándose más en unos pocos de detalles. Además, son los que suelen poner las mejores notas de humor en la novela.

La violencia, aunque presente, está muy suavizada respecto a los trabajos anteriores de Abercrombie. Lo mismo se aplica a ese desarrollo de los personajes, en los que en ocasiones, no les queda otra que seguir adelante y guardarse los remordimientos en algún lugar donde no puedan molestar demasiado, pues no tienen otro remedio. Aunque la carga de Yorvi no sea como la de Logen o, peor aún, la de Glokta, el estilo se asemeja de un modo inconfundible. Etiquetada como literatura juvenil, Medio rey contiene más elementos incómodos y que invitan a la reflexión que muchas otras obras que han evitado ser marcadas como libros para "young adults".

En resumen, a excepción de los excesos de sangre y los diálogos tan "coloquiales" de sus otras novelas, el estilo de esta novela es decididamente el de Joe Abercrombie. Si estás buscando una novela sencilla, con aires muy familiares en la historia, pero con un desarrollo menos marcado por los tópicos, esta es una buena elección. Por mi parte, voy a esperar con ganas las nuevas entregas de El Mar Quebrado.

2 comentarios:

  1. vaya, tiene buena pinta por lo que comentas aunque una vez leído todo lo anterior n o me han quedado muchas ganas de más.

    gracias por reseñarlo.

    un saludo

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    1. Pues sí, si tienes hartón de Abercrombie, quizá sea mejor que al menos dejes pasar una temporada antes de probar con este, porque te va a resultar muy familiar.

      Un saludo.

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